“Es un montaje político para desviar la atención”, dijo Federico Kreimerman tras conocerse el fallo.
La fiscal Fabiana Corbo logró la imputación al presidente del sindicato de OSE, Federico Kreimerman, por la bomba de humo que encendió en el edificio central de OSE durante una movilización.
El delito imputado fue atentado especialmente agravado, y se fijó como medida cautelar la fijación de domicilio de Kreimerman y la prohibición de modificarlo sin avisar al juzgado.
Corbo explicó que la manifestación sindical y el derecho de huelga está garantizado, pero agregó: “El derecho de huelga está consagrado en la Constitución, pero la huelga debe ser pacífica, cuando deja de ser pacífica y se torna violenta puede configurar delito, como entiende que ocurrió en este caso la Fiscalía”.
La fiscal solicitó a OSE más imágenes de cámaras de seguridad para continuar con la investigación y definir si hay más dirigentes sindicales involucrados.
De acuerdo a lo que dijo Kreimerman en medio de comunicación, la fiscal señaló que en la manifestación se encendieron más de 20 bombas de humo.
El abogado de Kreimerman, Juan Fagúndez, anunció que apelará la imputación: «Los propios testigos de la Fiscalía dicen que ninguno se sintió afectado como para consultar a un médico por el humo. Estamos hablando del famoso humo, y todas las circunstancias de que este delito requiere que haya violencia o amenazas sobre los funcionarios (bueno) ningún funcionario ni el directorio ni en ningún lado sufrió una amenaza o violencia».
«Usar la herramienta penal para una actividad sindical que no está discutida ni protocolizada es la penalización de la protesta sindical», cuestionó Fagúndez.
“Es un montaje político para desviar la atención”
El presidente del sindicato de OSE, Federico Kreimerman, aseguró que la decisión de imputarle un delito de atentado especialmente agravado por encender una bomba de humo dentro del edificio central de OSE durante una manifestación en junio, “es un montaje político para desviar la atención”.
Kreimerman habló en rueda de prensa este jueves tras ser imputado por la Justicia a pedido de la fiscal Fabiana Corbo.
“Lo tomamos como una judicialización de la protesta social y un montaje político para desviar la atención”, insistió, en referencia al proceso de licitación para que un consorcio privado construya una planta potabilizadora en la costa de San José con agua del Río de la Plata.
El sindicato de OSE se opone a esta licitación, denuncia que va a costar dos veces más de lo previsto y que solo beneficiará al consorcio privado.
Kreimerman reiteró que el fallo judicial en su contra “busca la criminalización de la protesta sindical”, y advirtió que “se quiere montar un escenario de violencia que no fue así”. “Buscan mostrar una violencia que no ocurrió”, agregó.
El dirigente sindical imputado tiene prohibido cambiar de domicilio sin informar al juzgado. Esta medida se aplica durante 60 días. / Fuente: Subrayado