Tal como estaba previsto, el exmilitar Francisco Macaluso compareció este miércoles ante el Juzgado Letrado de 5° Turno de San José de Mayo por incumplimientos relacionados con la medida de prisión domiciliaria que cumple por razones de salud.
Macaluso, junto al también exmilitar Rubens Francia, fue condenado a 12 años y seis meses de prisión por delitos de tortura, tras el juicio promovido por expresos políticos de San José que estuvieron recluidos en el Batallón 6 durante la última dictadura.
La Dra. Fiorella Garbarino, del Observatorio Luz Ibarburu -que solicitó el envío de Macaluso a una cárcel común– indicó que los incumplimientos fueron dos y que ambos estuvieron vinculados a la descarga de su tobillera electrónica. El primero se registró el 8 de julio, día en el que estuvo apagada durante media hora y el restante el 29 del mismo mes, en el que permaneció inactiva por casi cuatro horas.
Garbarino indicó que en la primera ocasión la Policía pudo comunicarse con él; durante la audiencia, Macaluso declaró que no recordaba el hecho.
Esto, sin embargo, no ocurrió en la segunda, motivo por el cual desde la Oficina de Supervisión de Libertad Asistida (OSLA) se notificó el hecho a Fiscalía que, como consecuencia de ello, solicitó la audiencia de este miércoles. Al respecto, el exmilitar dijo que después de almorzar temprano, se acostó a ver un partido de fútbol y que no atendió las llamadas por ser efectuadas desde números desconocidos, siguiendo las indicaciones de sus familiares. Posteriormente, uno de sus hijos se contactó con uno de los números desde los cuales fue llamado, constató que era de la OSLA, y procedió a cargar el dispositivo.
En la audiencia de esta tarde, la jueza Dra. Maria José Camacho dispuso que en un plazo de tres días la OSLA informe «si Macaluso salió en algún momento de su casa (está radicado en Minas), si el dispositivo funcionaba correctamente y corrobore los números con los que se pueden comunicar, tanto con Macaluso como con sus familiares».
Del mismo modo, Camacho pidió que en un plazo idéntico el Instituto Técnico Forense de Minas determine si la condición de salud de Macaluso se mantiene invariable o, por el contrario, tuvo algún cambio y si su envío a una cárcel común es viable.
«Con estos incumplimientos, el Código es tajante y establece que cuando hay incumplimientos, la prisión domiciliaria tiene que ser revocada», sentenció la abogada.