La Unidad 2 del INR, es un establecimiento de mínima seguridad; llegaron como parte de su proceso de rehabilitación.
De acuerdo a lo informado por el Ministerio del Interior, a través de su página web, «forma parte de un plan piloto que a futuro se proyecta expandir».
«Lo que tenemos hoy es algo histórico: nunca en el sistema penitenciario ha habido un régimen abierto como este para mujeres, un lugar de mínima seguridad. Recién estamos haciendo un plan piloto de observación que nos va a llevar mucho tiempo pero es un logro importante.”, explicó Jorge Solé, director de la Unidad.
Las seis internas -que proceden de la Cárcel de Mujeres de Montevideo (Unidad 5) se integrarán al régimen laboral del establecimiento.
En principio llevarán adelante un emprendimiento de elaboración de quesos. “Como somos una unidad agrícola lechera, vamos a empezar a hacer queso, primero para consumo interno. Las mujeres van a hacer las tareas que hace cualquier otro interno, esto no es un tema de género, van a trabajar todos de la misma forma, van a tener el mismo régimen», señaló.
El establecimiento tiene 266 hectáreas y las personas privadas de libertad que se alojan allí trabajan en el tambo y en la siembra y la cosecha de distintas hortalizas en turnos de ocho horas.
Los productos cultivados tienen como destino el abastecimiento de las unidades de la zona metropolitana.