La familia de la joven de 25 años aseguró que la mujer era víctima de violencia de género.
La Policía encontró este viernes el cuerpo de Agustina González, la joven de 25 años cuyo paradero era desconocido desde la noche del sábado, cuando su familia aseguró que partió de su casa acompañada de su novio.
El cuerpo fue encontrado en una especie de cañaveral y semidesnudo. La noticia fue confirmada por El Observador con fuentes policiales.
La zona donde fue encontrado es de difícil acceso, por lo que la Policía pidió la asistencia de Bomberos.
El hombre había estado detenido, pero luego puesto en libertad porque la fiscal que entonces tenía el caso, Brenda Puppo, no había obtenido suficientes pruebas en su contra. A pesar de esto, la familia de la joven aseguró en varios medios de prensa que la mujer era víctima de violencia de género.
El equipo de Personas Ausentes de Interpol había recorrido el Cub de Golf del Oeste, cerca del barrio Casabó, con el novio de la joven, quien aseguró ante la Policía que no la mató, pero que la había visto morir.
En esa recorrida, las indicaciones que dio el hombre no dieron resultados.
En conversación con Subrayado Marta Uriarte, la abuela de la joven desaparecida, contó que la última vez que el novio le pegó ella la defendió. «Él le pegaba mucho, le pegaba como loco y yo la defendía. La última vez que le pegó yo casi lo mato, casi lo apuñalo. Un poco más lo cago a puñaladas porque le pegaba mucho a ella y yo siempre la defendía«, dijo.
La mujer dijo que siempre le decía a su nieta que terminara con la relación y que ambos tienen dos hijos pequeños en común.
El viernes, un día antes de la desaparición el padre había ido a una seccional a denunciar al novio por «amenazas y violencia doméstica» contra su hija, en una relación que días después definió como «violenta» y en la que el sospechoso «le vivía pegando» a Agustina.
Horas después de esta denuncia, el padre relató que escuchó gritos de su hija en la puerta de su casa y algunos vecinos declararon que los vieron pasar a las tres de la mañana del domingo. Cuando el padre fue a ver qué sucedía ya no estaban.