Se manifestaron en Cerro Norte; hubo pedreas y disparos contra la Policía.
Leonardo da Cunha, de 18 años, fue apuñalado cuando intentó cometer una rapiña el lunes en el barrio Cerro de Montevideo. Quedó herido grave y murió al ser trasladado al hospital de la zona. Dos días después los familiares se manifestaron en reclamo de justicia, al conocer la resolución de la Fiscalía de dejar libre al agresor.
La manifestación en el barrio terminó con incidentes con la Policía. Hubo pedreas tras una quema de neumáticos y de maderas, en plena calle. Incluso se escucharon disparos de arma de fuego en ese momento.
Verónica Peñaflor, familiar del rapiñero fallecido, dijo a Subrayado: «Al chiquilín lo mataron en Berna y Polonia; iba a cometer una rapiña, sí. Queremos pedir justicia porque lo mataron injustamente de una puñalada en el corazón y dos en los pulmones. No estamos de acuerdo con la liberación del muchacho (el agresor), queremos justicia. Que el ministro del Interior nos diga algo coherente. Que no lo deje venir para la casa a estar sentado. Ni prisión domiciliaria ni nada, esto fue una muerte en vano y violenta».
Sobre la manifestación y los incidentes, Peñaflor explicó que la Policía les indicó que no podían cortar la calle con la quema de cubiertas. Ellos les dijeron que esperarían a la prensa para leer una carta, y que luego se retirarían sin problemas.
«Le leemos la carta y nos retiramos tranquilos. No va a haber agresiones hacia la Policía ni hacia nadie», cuenta Peñaflor sobre lo que le dijo al comisario responsable del operativo. «Lamentablemente ocurrió que unos gurises tiraron piedras a la Policía. Lamentablemente esto no tendría que haber pasado y pasó», agregó.
Daiana da Silva conoce al joven fallecido desde que era niño. «Era como un hijo para mí. Él hoy no está», expresó a Subrayado. Y apuntó contra el agresor, hoy en libertad: «Dejó una familia destrozada, y al asesino no le importa». «Yo sé que cometió un delito pero qué; no era para matarlo así como lo mató».
Da Silva denunció que la Policía y el agresor le pegaron al rapiñero mientras estaba en el piso y pedía auxilio. «Él pedía, por favor, que lo llevaran porque se estaba desmayando. ‘¡Por favor, llévenme!’, decía», según la mujer.
«Lo dejaron morir. La Policía y el asesino ese, que está sentado con la madre», apuntó.
Fiscal liberó al detenido.
El primero de los delincuentes murió en el Hospital del Cerro tras ser ingresado, el mismo lunes. La Policía informó que tenía indagatorias por rapiña y hurto. En tanto, quien lo apuñaló quedó detenido en el momento y a disposición del fiscal de Homicidios Carlos Negro.
Negro entiende que el caso es de legítima defensa y no de homicidio, por lo que este martes dejó en libertad al joven detenido. Esa carátula halla exento de responsabilidad el que obra en defensa de su persona o derechos, o de la persona o derechos de otro, ajustado a una serie de características detalladas en el Código Penal.
La decisión fiscal causó molestia en los familiares del delincuente, que convocaron rápidamente a una movilización en el mismo lugar donde ocurrió el episodio. / Fuente: Subrayado