El relato de un padre que perdió todo y apela a la solidaridad.
Marcelo Martínez y su familia vivían en una casa ubicada en José Serrato y J. B. Morelli en el barrio La Unión hasta la pasada noche. Un incendio generalizado quemó todas las pertenencias, incluso las herramientas de trabajo del hombre y su hijo menor que se desempeñan como vendedores ambulantes.
El responsable del incendio fue su otro hijo, de 21 años. El joven es adicto a la pasta base y tras una discusión prendió fuego todo.
«Ayer llegó a mi casa mi hijo que va y viene. Me pide $200 y yo soy vendedor ambulante y no se está vendiendo nada. Le dije que no tenía y me agarró a puñetazos como tantas otras veces. Me dice ‘ahora vas a ver’. Además, me trajo una bicicleta robada y ese fue el problema más grande, porque le dije que yo acá no iba a tener absolutamente nada. Me la dejó adentro y yo la tiré para afuera. Viene a eso de las 20:00 con un encendedor y kerosene y rocía un sommier. Traté de apagarlo y no pude. Yo saco el colchón para afuera y me empujó entre las llamas. Tengo toda la espalda quemada. No pude apagarlo y se prendió todo fuego», relató Martínez a Telemundo.
Entre las pérdidas está un carro con antigüedades y cajas con medias y muñequeras que vendía su hijo.
El delincuente fue detenido, pero liberado a las pocas horas.
«Concurro a la unidad de violencia doméstica y con testigos y me dicen que esta vez sí iba a tener andamiaje la denuncia. Al rato me llaman para decirme que lo dejaron libre y que se pusieron medias cautelares. Le digo a los señores jueces y fiscales: si él a mi me mata hoy o mañana se van a acordar de esta cara. ‘Salgo y te mato’, me dijo. Esta es la Justicia que tenemos», se lamentó.
Martínez contó que no es la primera vez que su hijo mayor lo ataca. Hace dos años, narró, lo quemó con grasa en el pecho y en otra ocasión lo cortó con un cuchillo.
«No lo denunciaba por temor a que el INAU me saque mi otro hijo y además, como es mi hijo, lo soportaba», señaló.
Añadió que el mes pasado salió con «dos facas, dos cortes carcelarios» y tuvieron que detenerlo «entre 19 funcionarios policiales y demoraron dos horas». «Pero volvió a quedar libre», se molestó.
«Somos rehenes de estos sinvergüenzas. Por drogarse igual matan al padre», concluyó.
Llamado a la solidaridad
Marcelo solicitó ayuda de la población al perder sus pertenencias. «Lo único que pido es poder tener un carro para trasladarme a mi lugar de trabajo y hacer la feria. Y alguien que tenga algo para vender, perdí todo: mercadería, comestibles, utensilios. Tengo esta camisa, esta bermuda y estos championes», dijo.
Para ayudar a Marcelo y su familia, se puede contactar al número 096 80 89 80. / Fuente: Telemundo