Había sido detenido por el robo de 5.000 kilos de lana de una estancia local. Pidió para ir al baño y escapó.
A fines del mes pasado, una estancia cercana a la pequeña localidad floridense de Goñi. Luis Dellapiaza, propietario de la mercadería sustraída, dijo que el robo resultó inusual y que sin duda fue hecho por conocedores.
En ese sentido, recordó que su lana era de alta calidad (merino australiano) y estaba almacenada en el mismo galpón donde otro productor guardaba lana de inferior categoría. Los ladrones sólo se llevaron las bolsas que contenían la lana merino. Fueron aproximadamente 5.000 kilos, por un valor cercano a 40.000 dólares. /Fuente: Ecos