Por unanimidad, la Junta Departamental aprobó anoche convocar al director general de Tránsito de la Intendencia, Marcos Reyes.
Fue a consecuencia de una moción urgente presentada por el edil Pablo García que tuvo como fin abordar el caso de agresión sufrido por el inspector Martín Arrúe la semana pasada en Ecilda Paullier.
La iniciativa hizo que tanto el propio Arrúe como el presidente de ADEOM, Cono Creciente, más otros funcionarios de la Dirección, presenciaran el debate desde la barra de la sala de sesiones.
Al abrir el tema, García manifestó que lo ocurrido le generó varias interrogantes.
«¿Quién hace la denuncia policial?¿El funcionario?¿El Ejecutivo?¿La Dirección de Tránsito?¿Qué amparo tienen las víctimas?¿Hay un protocolo?» se preguntó.
Pero a raíz de intervenciones de otros ediles, rápidamente las deliberaciones se derivaron hacia otros aspectos vinculados al funcionamiento de la repartición y no solo a las situaciones de agresión que padecen los funcionarios.
La falta de inspectores, su ausencia en algunas zonas así como también durante ciertas horas, y la coordinación de tareas con la Policía de Tránsito fueron ítems mencionados durante el tratamiento de tema.
Por todo ello, y a iniciativa del FA, la corporación aprobó por unanimidad -28 e 28- convocar al titular de tránsito a sala para considerar tanto estos como otros temas.
EN EL DEBE. En este marco, varios ediles coincidieron en la necesidad que tiene el Legislativo de contar, cuanto antes, con una Comisión de Tránsito, algo que fuera planteado hace más de un año por el edil Ángelo Panzardi (PN).
Actualmente, las inquietudes que se formulan vinculadas al tránsito se elevan a la Comisión de Obras y Servicios Públicos.
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