Piden a a Intendencia que tome caras en el asunto.
El edil Daniel Blanco (FA) trasladó a la Junta Departamental la preocupación de los vecinos que residen en las popularmente conocidas como «viviendas de los inundados» del barrio Picada de las Tunas que, al día de hoy, no cuentan con los títulos de propiedad.
Blanco indicó que se trata de 50 unidades ubicadas en los padrones 11352 y 11353, situados en calle Venezuela entre Costa Rica y Chile, cuyos residentes «no tienen posibilidad de hacer ningún trámite a nivel legal» por esa situación.
Al respecto, el edil dijo que una solución podría lograrse por intermedio del Art. 65 de la ley 18.308 de Ordenamiento Territorial, que permite llevar a cabo una prescripción adquisitiva.
«Aquellas personas cuyo núcleo familiar no supere el nivel de pobreza en sus ingresos y que, no siendo propietarias de inmuebles, sean poseedoras de un predio, no público ni fiscal, con aptitud de ser urbanizado de acuerdo con el instrumento de ordenamiento territorial aplicable, destinado a su vivienda y la de su núcleo familiar durante un período de cinco años, podrán solicitar a la Sede Judicial competente se declare la adquisición del dominio sobre el mismo por el modo prescripción. La posesión deberá ser ininterrumpida y con ánimo de dueño, pública y no resistida por el propietario» establece el referido artículo.
En ese sentido, Blanco indicó que la iniciativa de tal prescripción pude ser tomada por la Intendencia, motivo por el cual elevó el asunto al Ejecutivo para su consideración, así como también a la Comisión de Legislación de la corporación.
Las «viviendas de los inundados» del barrio Picada de las Tunas fueron construidas por la empresa Calpusa S.A. e inauguradas hace casi 25 años, durante la gestión de Juan Chiruchi como ministro del ramo.