La norteamericana Ayana Williams había batido un récord Guinness con su extraña manicura de siete metros de largo.
Después de 28 años sin tocar sus manos y dejando crecer sus uñas hasta superar los siete metros, la estadounidense Ayanna Williams se despidió de su peculiar manicura, que la había llevado a batir dos récord Guinness.
Williams, dejó crecer sus uñas en la década de los 90 y en el 2017 batió su primer récord, cuando llegaron a 5.3 metros y este año, antes de despedirse de ellas, fueron medidas y superó su récord anterior con unos impresionantes 7.5 metros de largo.
Para mantenerlas, indicó, necesitaba más de dos botellas de esmalte y 20 horas de trabajo.
Pero la dedicación que daba a sus uñas también le presentaba algunos obstáculos en su vida diaria, como no poder lavar la vajilla ni hacer la cama.
Finalmente Williams concurrió a un centro cosmético donde se las cortaron por primera vez en casi tres décadas y sus uñas ahora serán parte de la exhibición permanente de Ripley’s Believe It or Not! en Orlando, Florida.
Con información de TeleNoche.