Todo sucedió después de finalizado el encuentro entre San Lorenzo y San Carlos de Colonia
El sábado por la tarde en el estadio Casto Martínez Laguarda de San José de Mayo, San Lorenzo recibió a San Carlos de Colonia, que se impuso por 2 a 1. En el partido de ida se había registrado un empate 2 a 2, por lo que el equipo josefino quedó fuera de competencia.
La eliminación generó un clima de tensión que derivó en incidentes. Algunos hinchas del local reaccionaron con violencia y agredieron al plantel visitante, llegando incluso a arrojar piedras contra el ómnibus que trasladaba a la delegación de San Carlos.
Ana Laura Porley, vecina que reside en las inmediaciones del Estadio Casto Martínez Laguarda, relató a San José Ahora cómo vivió los mencionados disturbios: «Yo llego el sábado a casa con el partido ya terminado, no veo nada raro: el ómnibus frente a casa, y el chofer con el ómnibus prendido. Ponele que cinco minutos después de que entré a casa, siento un parlante, voy por la ventana de mi cuarto, miro y estaban todos los chiquilines de Colonia (jugadores de San Carlos) totalmente normal, conversando entre ellos sí, pero en un ambiente entre ellos, ni siquiera de festejos, ni de cantos, ni de nada«.
A los pocos minutos, sintió que fuera de su casa había un cierto bullicio que llamó su atención. Fue allí cuando salió junto a sus hijas para ver la situación y rápidamente llamar al 911, debido a que ve «al cuadro completo de San Carlos, junto al cuerpo técnico, tratando de parar de que no le tiraran piedras, y a una barrita de 10 a 15 personas (identificadas con San Lorenzo), tirando piedras. Es en eso que le rompen el parabrisas al ómnibus de los colonienses«.
Mientras continúan los incidentes, la vecina destacó que «cuando veo que uno de los de San Lorenzo agarra una piedra enorme, y la iba a tirar, ahí fue cuando me saqué: me metí a los gritos entremedio, mientras las piedras volaban, y les pedí por favor que pararan, que era mi casa, que estaban mis hijas«. Mientras continuaban esos momentos de tensión, la vecina le preguntó a los hinchas de San Lorenzo «¿Cuál es el problema?» a lo que le respondieron «pero mira dónde vinieron a parar el ómnibus«, haciendo alusión a que a los identificados con el club Santo, les molestaba que el vehículo de Colonia fuera estacionado frente al estadio.
Porley, agregó que en ese momento «no había un móvil policial, continué insistiendoles que pararan y empezaron a caminar para atrás«, de esa manera logró evitar que no continuaran arrojando piedras a los jugadores de San Carlos.
La vecina, destacó que «lo que falló acá fue la seguridad, no sé por qué no había un patrullero, no sé por qué el estadio una vez que saco a la gente y a los jugadores, no se encargó de la seguridad del ómnibus. Quedaron todos tirados y después de que pasó todo esto, sí aparecen 3 o 4 móviles, que retiran al plantel custodiado«. Recalcó que los jugadores visitantes en ningún momento de los hechos que ella relató, provocaron a los de San Lorenzo.