El edil Daniel Blanco (FA) presentó este lunes en la Junta Departamental un proyecto de decreto con el objetivo de regular la actividad de los locales en los que funcionan máquinas tragamonedas y prevenir la adicción al juego.
La iniciativa, de 11 artículos, fue derivada a la Comisión de Legislación del deliberativo para su consideración.
El proyecto, que en caso de aprobarse entraría en vigencia el 1 de marzo del próximo año, establece que los locales, incluidos bares y almacenes, podrán contar con hasta 15 máquinas; asimismo, estará prohibido el ingreso de menores de 18 años de edad.
Cada establecimiento «deberá contar con un baño con accesorios en loza sanitaria (inodoro y pileta) en óptimas condiciones de higiene y aseo, así como también una puerta interior en buenas condiciones y suficiente iluminación«. También deberán tener «un reloj de pared a la vista» y «cartelería y/o folletería preventiva que será entregada oportunamente».
La iniciativa también crea un «registro de propietarios de máquinas tragamonedas» y una «tasa municipal por máquina tragamonedas, cuyo canon mensual a abonar por parte de los titulares de locales registrados será de 0,50 UR por cada una.»
«El no pago en tiempo y forma de dicho canon producirá automáticamente una multa del 100% sobre el total que se debería haber abonado», añade al respecto.
En tal sentido, el proyecto indica que lo recaudado por dicho canon «será vertido en las campañas que se promoverán desde la Intendencia (…) así como también para apoyar diferentes programas y proyectos a nivel deportivo.»
Las campañas «deberán tener como finalidad la prevención y tratamiento del juego, promoviendo y sensibilizando a través de la comunicación, cartelería y folletería, los efectos negativos derivados del juego compulsivo.»
Finalmente, indica que la violación del «presente decreto será sancionada con la aplicación de multas progresivas, fijadas de 10 a 50 Unidades Reajustables, de acuerdo al grado de incumplimiento y reincidencia».