Personal de Bomberos, con la colaboración de la Intendencia, trabaja en ruta 23, para minimizar los efectos del derrame de ácido ocurrido sobre esa arteria.
La tarea consiste en colocar arena sobre la «mancha» para que absorba la sustancia.
De acuerdo a las primeas averiguaciones, se estima que el episodio ocurrió entre las 6:30 y las 7 de la mañana de este sábado.
El ácido se esparció a lo largo de casi seis kilómetros, sobre todo sobre la senda con sentido Norte, entre los Km. 123,500 y 129 según reportaron vecinos.
Camiones y otros vehículos que pasaron por el lugar durante las horas posteriores, sufrieron la corrosión de su pintura.
Por otra parte, al menos dos personas que circulaban en moto, residentes en Ismael Cortinas, resultaron lesionadas por los efectos de la sustancia.
«Se les caía la ropa a pedazos» graficaron testigos, para dar cuenta de la magnitud de la afectación.
El tránsito se encuentra desviado por caminos internos de esa zona del departamento de San José.
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