El programa conducido por Néstor Bentaberry es un clásico de las mañanas dominicales, pese a haber nacido como “de casualidad”.
Los domingos de 8:30 a 10:30 cientos de oyentes de la 107.9 FM saben que tienen dos horas de música nacional en ritmo de folklore, murga o popular. Muchos de esos oyentes llegaron desde Encuentro FM, “la radio de los curas”, que fue desde donde se empezó a emitir el programa Sonidos de Nuestra Tierra allá por agosto del año 2003.
Por aquel entonces el obispo de la Diócesis de San José, Monseñor Pablo Galimberti, vio en el técnico informático de la emisora, quien además era radioaficionado, un potencial conductor de un nuevo programa de radio, cuyo eje central fuera la música.
Néstor aceptó el desafío y así nació lo que en principio solo se llamaría “Sonidos”, pero que finalmente se bautizó como “Sonidos de Nuestra Tierra”. Desde el inicio el espacio ha buscado rescatar, a través de nuestra música, historias, anécdotas, personajes y hechos, recuperándolos de la memoria colectiva”, según nos dijo el comunicador, quien encuentra su mayor motivación en la interacción con la audiencia que domingo a domingo lo sintoniza, principalmente gente mayor, muchos de ellos residentes en la zona rural del departamento y zonas aledañas. Por ejemplo, este domingo 5 de agosto el tema central será “El Emilio”, personaje popular de San José de Mayo recientemente fallecido.
Al conductor le gusta “abrir el baúl de los recuerdos” y hacer sonar nuevamente voces que ya casi no se escuchan, como las de Amalia de la Vega, Aníbal Sampayo u Osiris Rodríguez por citar algunos ejemplos; “no nos pesa pasar algo que tiene ruido de vinilo, más vale como documento poder compartir eso que la calidad sonora”, dice.
Emitir música -o “sonidos” como le gusta decir a Néstor- de todo el país es otro de los grandes cometidos del programa, dado que considera que si bien Uruguay es un país pequeño territorialmente, tiene incidencias de Argentina y Brasil, sobre todo en la zona norte, por lo que es importante darles difusión de igual manera que la del sur, donde “somos más de la “milonga surera”.
Consultado sobre sus perspectivas entorno al programa tras 15 años de emisión, no muestra mayores expectatvas ni se muestra muy optimista considerando las “miserias publicidades que andan a la vuelta”, y agrega: “no se puede hacer una chanchada, hay que valorizar los espacios porque llevan tiempo y trabajo”.
El comunicador de 45 años de edad y que se gana la vida dictando clases de informática, concluye diciendo que en definitiva busca hacer un programa “culturoso”, que este mes de agosto, en donde los tiempos de la comunicación son tan efímeros, está cumpliendo 15 años.
- Fernanda Díaz dejó Radio 41
La joven periodista de 21 años de edad se desempeñaba como directora de prensa de la emisora.
En un mensaje escrito en su cuenta personal de Facebook, Fernanda agradeció a la audiencia, a los compañeros y a la radio. Entre otras cosas escribió: “Me toca emprender nuevos rumbos en otra área de la Comunicación, alejándome de cierta manera del periodismo, empezando a ser parte de un nuevo equipo de trabajo empresarial…cosas buenas fueron muchas, las malas también fueron muchas pero aprendo de las últimas y me quedo con las primeras en el corazón”.
En otra parte expresó: “el gracias más grande va dedicado a mi familia, que me vio reír feliz y me vio llegar angustiada a casa porque las cosas o las personas no eran lo que yo me esperaba”.
A continuación el mensaje textual:
Esta mañana me toca decir adiós.
Hoy cierro un ciclo de muchísimo aprendizaje personal y profesional, ha sido realmente un honor poder tener este micrófono delante y cumplir con mi misión de llegar al que está del otro lado, ha sido un verdadero privilegio y la audiencia de Radio 41 sabrá lo mucho que voy a extrañar esa interacción.
Me toca emprender nuevos rumbos en otra área de la Comunicación, alejándome de cierta manera del periodismo, empezando a ser parte de un nuevo equipo de trabajo empresarial.
Hoy es un día para agradecer, agradezco esta oportunidad que me ha enseñado como no se imaginan. cosas buenas fueron muchas, las malas también fueron muchas pero aprendo de las últimas y me quedo con las primeras en el corazón.
El gracias más grande va dedicado a mi familia, que me vió reír feliz y me vió llegar angustiada a casa porque las cosas o las personas no eran lo que yo me esperaba..
El siguiente gracias es para mis amigos que nunca me dejaron caer, que me alentaron en cada proyecto y que nunca perdieron la fe en mí, incluso cuando yo no la tenía..
Por último agradecer a aquellas personas que se comportaron como verdaderos compañeros, que me tendieron una mano desde el minuto cero cuando tuve que enfrentar un cargo y varias responsabilidades viéndome siempre como una compañera más y no como una competencia.. como debe ser.
Fue todo un desafío con 21 años asumir el labor del jefe de prensa, y creo que después de todo no salió tan mal..
Trabajar en la radio líder en información de este departamento me abrió muchas puertas y me enseñó que siempre siempre debemos dar lo mejor desde el corazón pese a las dificultades de los medios de comunicación del interior, el labor del periodista aquí implica mayor esfuerzo porque somos multifacéticos y le ponemos mucho tiempo y garra a esta hermosa profesión..
Por eso me quedo muy feliz por todo lo aprendido y me despido para continuar este camino de oportunidades que es la vida..
Muchísimas gracias CW41, ha sido un honor ocupar este lugar…
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