A instancias del Ministerio de Trabajo se reinstaló sin demasiados avances este martes la negociación tripartita en el sector lechero.
Fue con la presencia de la Cámara de la Industria Láctea (CILU), de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) y de representantes de la cartera.
Sin embargo, la situación y las posiciones de las partes continuó invariable, y el conflicto entre Conaprole y sus trabajadores se mantiene.
Por parte del MTSS se manejó la posibilidad de que el Consejo de Salarios siga funcionando con un plazo breve para su culminación no mayor a los diez días.
Asimismo, a raíz del mandato de los productores a Conaprole de no negociar en tanto haya medidas de fuerza, la cartera planteó a los trabajadores suspender dichas acciones para poder avanzar en los Consejos de Salarios.
En este contexto, la Federación señaló que el conflicto que hay en Conaprole y las negociaciones colectivas son situaciones aparte.
Por ello, propuso que las diferencias que mantienen la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole con el Directorio y los productores de la cooperativa se pase a la órbita del Ministerio.
«De esa forma se logra desmarcar y permitir la negociación, ya que una cosa no tiene nada que ver con la otra» explicó el prosecretario del gremio de Conaprole y dirigente de la FTIL, Enrique Méndez.
De todas formas, Méndez aseguró que para que el sindicato revea la posibilidad de levantar sus medidas tiene que llegar al menos como contrapartida alguna propuesta por parte de Conaprole.
Según el dirigente, los temas que están en medio del conflicto ya se discutieron por 150 días «con 0 avance». «Es difícil que se reinstale un ámbito de negociación cuando todo lo anterior fue infructuoso», explicó.
La FTIL mantendrá una reunión este viernes a partir de las 9 horas para analizar la situación. (con información de El Observador)
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