El Dr. Fabricio Cidade asumió en la tarde de este miércoles como nuevo Juez Penal de la ciudad de San José de Mayo. Lo hizo el mismo día en que entró en vigencia el nuevo Código del Proceso Penal.
Durante los dos últimos años, el magistrado se desempeñó como Juez Penal de Primera Instancia de 2º Turno de Payandú.
Oriundo de Lavalleja, Cidade tiene 42 años y hace 15 que ingresó al Poder Judicial. Fue funcionario, actuario, Juez de Paz, Juez Letrado y Juez Penal.
El ahora titular de la sede llegó a la misma sobre las 16.50; minutos después dialogó con los medios de comunicación que durante varias horas hicieron «guardia» esperando su llegada.
Inicialmente habló del nuevo Código, dijo que representa «un cambio sustancial» para la justicia uruguaya y manifestó tener expectativas positivas con respecto a los resultados de su aplicación.
Acerca de la realidad de San José, manifestó tener una «noción informal». Señaló estar al tanto de algunos casos de pública notoriedad, como el de la alguacil Susana Odriozola, pero admitió no tener el detalle de otros que han preocupado o siguen preocupando a la población.
«Siempre he sido un juez justo con la sociedad y el delincuente» respondió, al ser consultado sobre su perfil de trabajo.
De todas formas, Cidade señaló que con el nuevo Código la posibilidad de los jueces de aplicar su impronta se ve disminuida, ya que las tareas de investigación recaen en los Fiscales. «Miramos un poco el partido de afuera», comentó.
El magistrado también expresó su preocupación por la incidencia de la droga en el delito. «Es su motor en un 99 por ciento. Es algo que la sociedad tiene en el debe y que el sistema tiene que abordar con mayor dureza», afirmó.
Cidade también habló del caso de violencia doméstica que protagonizó en el 2016 junto a su ex esposa.
La información difundida por el diario El Observador señaló que el juez había sido procesado por ese delito. Sin embargo, dijo que no fue así.
«No fui procesado porque no hubo denuncia penal. Fue una situación familiar que se sustanció en un juzgado de familia», aclaró.
Según indicó, tras cumplir con las medidas cautelares que se le aplicaron, el caso fue archivado. «No sé el motivo por el cual salió esto ahora», se preguntó.
De todas formas, Cidade consideró que la divulgación tiene como fin lesionar el trabajo que inicia en su nuevo destino.
Asimismo, y sin identificar a alguien en particular, se mostró seguro de que el hecho fue originado en Paysandú «por gente que se sintió afectada por mi labor».
Aunque consideró que el hecho no va a influir en su tarea, reconoció que «no es fácil enfrentar una desestabilización de este tipo, a pocas horas de llegar».
«Espermos, a pesar de todo esto, poder arrancar con el pié derecho», añadió.
DOS. Mucho más temprano, había asumido como Jueza Penal de Primera Instancia de Primer Turno, la Dra. Gladys Marcela Sena, quien hasta el momento se desmpeñaba como Juez Letrado Suplente del Interior.
Sena y Cidade serán quienes encabecen la sede en forma conjunta, si bien actuarán en forma independiente en materia técnica.
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