La presentación será este sábado 26 de agosto a las 20 horas en el Espacio Cultural de San José, ubicado en la intersección de las calles 18 de Julio y Treinta y Tres. En la oportunidad se contará con la presencia del escritor.
Martín Palacio Gamboa
Músico, traductor, escritor, notero free lance y docente. Pese a haber nacido en Montevideo (1977), su vida transcurrió mayormente en el interior uruguayo así como en Buenos Aires y el norte del Brasil. Su obra ensayística (Los trazos de Pandora, Tomar el cielo por asalto. Cuatro poetas uruguayos al acecho de la modernidad, Las estrategias de lo refractario. Poética y práctica en la obra de Clemente Padín, Ectoplasmosis) se caracteriza por la hibridación de géneros y registros, así como por la elaboración ramificada de una constelación de conceptos que no escatima lo lúdico. Su obra poética (Lecciones de antropofagia y Celebriedad del fauno) se caracteriza por un constante experimentalismo, aunque en esta nueva entrega que se titula Psikodalia se propone ir a una lírica y una lengua que está también en las raíces de la tradición hispánica: la que se escribió y se escribe en lengua ladina.
Sobre “Psikodalia”
Editado por el sello independiente Pixel (La Plata, Argentina), este poemario tiene la característica de ser bilingüe ya que los textos que lo integran fueron escritos en ladino, el idioma hablado por las comunidades judías descendientes de hebreos que vivieron en la península ibérica hasta 1492, llamados sefardíes. El ladino, aunque procedente del castellano medieval, presenta también rasgos en diferentes proporciones de otras lenguas peninsulares y mediterráneas. Contiene aportes del hebreo, con alguna influencia del árabe, el turco e incluso del griego. En Uruguay, varias canciones en ladino fueron interpretadas por Ethel Afamado, Washington Carrasco y Cristina Fernández, así como por el gran Eduardo Darnauchans. Sin embargo, en América Latina, el único precedente literario que escribió y publicó en ladino es el poeta argentino Juan Gelman. Martín Palacio Gamboa hace su apuesta a partir de su propio vínculo con las comunidades sefardíes y palestinas en la ciudad de Chuy, departamento de Rocha, y en Recife, capital de Pernambuco, Brasil.
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*Foto: cooltivarte.com