Fue al término del partido en que Central se impuso por 2 a 0 ante Wanderers de Artigas jugado en el Estadio Casto Martínez Laguarda. En la ida también había sido victoria decana por 2 a 1.
El partido había estado “picado” por momentos y desde las tribunas habían sido arrojados algunos objetos a los bancos de suplentes; tras el pitazo final se registró la escena más violenta.
El arquero de Central, Fabio García, fue quien llevó la peor parte tras ser golpeado en el suelo, por lo que debió ser trasladado a un centro asistencial para realizarle una placa ante la posibilidad de haber sufrido lesiones de consideración.
Vale aclarar que las agresiones llegaron de parte de los jugadores de Wanderers, sin responder los futbolistas de Central, quienes de forma inteligente no cayeron en la provocación -mordiéndose los dientes sin lugar a dudas- ya que el equipo «decano» sigue en carrera en la Copa de OFI.
La actitud de el capitán bohemio Gerardo Monge, quien fue profesional -jugó en Nacional de Montevideo- fue deplorable y mostró poco de profesional, fue el responsable de los incidentes.
Pero esta actitud «patoteril» no es nueva, ya lo han demostrado antes, en Artigas te hostigan y en el 2015 llegaron a jugar con Río Negro en San José de Mayo y contrataron mucha policía, metiendo guardaespaldas al terreno de juego, apretando jueces y rivales.
¿La gran cómplice de estas actitudes de varios años? La Organización del Fútbol del Interior (OFI). ¿Hasta cuándo?
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*Fotos: José Gutiérrez *Video: Captado por hinchas y enviado por whatsApp