Honda preocupación existe en la comunidad educativa de la escuela 22 de Villa María por el muy mal estado del edificio que alberga al centro educativo.
La situación fue calificada como «grave» por el edil del Partido Nacional, Mario Guerra, quien presentó una moción en la Junta para reclamar soluciones a las autoridades.
Según Guerra, las anomalías son «innumerables». Entre ellas cito el caso de una de las paredes del salón de primer año que, en su opinión, «se derrumba en cualquier momento».
«La puerta de acceso está horrible. Hay cables colgando, sin tierra. Hay vidrios rotos, se llueve por todos lados. Hay pisos que están hundidos. Los baños están en un estado deplorable» enumeró además el legislador.
Aun así, las clases se dictan con normalidad. A la escuela concurren unos 110 niños. «No hay donde llevarlos. La Directora pidió contenedores, pero hasta el momento no han existido respuestas», señaló Guerra.
En la moción que presentó en el deliberativo -que será tratada en la sesión del lunes 24 de abril- el edil solicita «exponer en sala la grave situación que padece la Escuela 22 de Villa María».
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