El próximo 15 de febrero se llevará a cabo la primera audiencia judicial correspondiente a la acción promovida por la comisión vecinal de Arazatí, con el fin de determinar las áreas de uso público del balneario.
Se trata de una derivación del caso del pescador Ruben Sánchez y el diferendo que mantiene con empresario Alberto Voulminot, quien alega que se encuentra ocupando un predio de su propiedad.
La defensa de Sánchez entiende que está dentro de la faja costera, propiedad del Estado y que, por ende, no puede ser desalojado.
La comisión ve en el del pescador un caso testigo. «Si Sánchez se va, esto va a seguir con el resto de la gente que va a la zona a veranear», aseguró el Edil del Partido Nacional, Mario Guerra, quien también forma parte del grupo.
Guerra dijo que el pasado fin de semana visitaron Arazatí unas 1800 personas. «Pero el lugar más lindo que tiene el balneario sigue cerrado por este señor, como desde hace varios años«, remarcó el legislador.
El curul aseguró que la voluntad de la Intendencia es desarrollar turísticamente la zona una vez que la situación se aclare.
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